26 agosto 2007

Lazos de Familia


Últimamente he estado pensando en toda la trama que se teje tras bambalinas cuando uno se empareja con otro.
La verdad es que creo que detrás de toda relación medianamente estable en el tiempo uno no solo se va comprometiendo afectivamente con la pareja, sino con toda la tropa que hay detrás de ella, es decir con hermanos, mamá, papá, tíos, primos, amigos y mascotas.

Por lo tanto ya ese espacio afectivo no solo se constituye en un nosotros dos, sino en tu, yo y toda la parentela.
Lo complejo es que en ese espacio "tu – yo" la relación puede llegar a ser plana, incluso en momentos tediosa; sin embargo seguimos atados por todo lo que implica ese colchoncito afectivo, económico o de estatus social que puede brindarte ese espacio familiar, sobre todo cuando se esta carente o porque nos sentimos “faltos” de ese algo que ellos nos otorgan.

No se trata de una historia personal, pero la he visto de cerca, y lo peor es que no necesita ser confirmada, porque a los ojos del espectador el guión y su desenlace es evidente…” Puede no tratarse de amor….sino de conveniencia”. Triste final.

Al que le quede el sombrero que se lo ponga...a fin de cuentas a buen entendedor pocas palabras.

3 comentarios:

Maria Ines dijo...

No hay peor elección que no elegirse...
Digo...
Ni status, ni dinero compran la alegría...
Y...
Además...
La familia del susodicho tiene muy claro cuales son sus lazos de sangre...
Hasta la mascota lo tiene claro...
Sino que pruebe dejar la joya, verás que todos los demás se ponen en la fila detrás de él...
Si quieres hacer un viaje de vida en barco debes tomar el timón...

AnaR dijo...

O la costumbre como contrato.
Sí, tienes toda la razón.Toda.

Un abrazo

Unknown dijo...

Hola
Tratas a la superficialidad de una forma subtil y llegas al plomo que tiene su peso

Saludos